Ofir de 16 años nació con una cámara cardíaca en lugar de dos. Con el paso de los años, ha estado viniendo al Centro Médico Hadassah para recibir tratamiento, unas 20 veces al año. Frecuentemente se ha tenido que quedar por semanas y a veces por meses. “Será nuestro paciente toda la vida y nunca tendrá una vida normal”, dijo su médico, el Dr. I. “Quería hacer algo especial para él, así que le prepare una sorpresa”.
El Dr. I. era solamente un estudiante cuando conoció a Ofir y se hicieron amigos. El hermano del doctor es un piloto de helicóptero en las Fuerzas de Defensa de Israel. (por cuestiones de seguridad, los pilotos no pueden ser identificados y como el doctor lleva el mismo apellido, su nombre se debe omitir también). Por el papel clave de Hadassah en ofrecer servicios de emergencia para la nación, muchas veces los pilotos aterrizan en Hadassah. Un día, el piloto llamó a su hermano para decirle que iba a parar en Hadassah como ejercicio de preparación militar de helicópteros. Como Ofir estaba en el hospital para recibir tratamiento, el Dr. I. le pregunto si quería ver como aterrizaba el helicóptero.
Ofir estaba muy emocionado. Cuando él y el Dr. I. se dirigían al helipuerto de Hadassah, ya podían ver al helicóptero en el aire y cerca de aterrizar. Ofir estaba devastado porque parecía que no iba a llegar a tiempo para ver el aterrizaje, pues por su condición cardíaca, no podía correr.
El Dr. I. llamó a su hermano y le dijo que estaban en camino. El piloto planeo sobre el helipuerto hasta que llegaron, entonces aterrizo frente a ellos. Vestido con el traje completo, el piloto bajo, se presento con Ofir, le dio la mano y le mostro el helicóptero. Se tomaron fotografías juntos. Su reciente relación continua con el piloto y él envía a Ofir posters y regalos de Unidad de Fuerza Área de manera periódica.
“Cuando hablamos de la familia de Hadassah, realmente lo sentimos”, dijo el Dr. I. “El cielo es el límite”.