Después de haberse tragado 11 veces la dosis máxima de Advil para un niño de su edad, un bebé llamado Yossi quedo inconsciente.
Rossi fue llevado a la sala de emergencia pediátrica del Hospital Hadassah Mount Scopus, donde el Director David Rekhtman y el equipo médico de Hadassah le salvaron la vida.
“Las pastillas fueron diseñadas para parecerse a caramelos, coloridos y también dulces” explica el Dr. Yackov Berkun jefe de Pediatría en Hadassah Mount Scopus.
El padre de Yossi recuerda: “ De la reacción rápida del personal a los equipos de rescate de emergencia. Todo el mundo fue genial. Es horrible ver a tu hijo con niveles de oxigeno e inconsciente; pero también fue inspirador ver cómo estos expertos hicieron exactamente lo que era necesario para detener el deterioro y salvarlo”.