Sosteniendo a su hija de 14 años, Ksenya, con una mano y apoyándose en su bastón con la otra, Elena caminó dolorosamente hacia la clínica de la Organización Médica Hadassah (HMO) en la frontera entre Polonia y Ucrania en Przemyśl, Polonia. Fue recibida por el Dr. Alex Gileles-Hillel de HMO, un neumólogo pediátrico y miembro de la Misión Humanitaria Hadassah que estaba allí para ayudar a los refugiados ucranianos.
El Dr. Gileles-Hillel preguntó cómo podía ayudar. Elena pidió tímidamente un analgésico, ya que estaba en agonía después de viajar varios días en tren desde Ucrania.
A instancias del médico, Elena permitió lentamente que su historia saliera de sus labios.
Elena era una madre soltera pobre que vivía en el centro de Ucrania. Cincuenta años, le habían diagnosticado cáncer de mama varios años antes. Debido a que no podía pagar el tratamiento médico que necesitaba, el cáncer había hecho metástasis en todo su cuerpo. Unas semanas antes de la guerra, le habían dicho que solo le quedaban unas pocas semanas de vida.
AYUDA A HADASSAH A ASISTIR A PERSONAS COMO ELENA
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Y luego comenzó el bombardeo ruso y su casa y todo lo que tenía fue diezmado.
Sin familia a quien acudir, Elena sabía que tenía que huir para garantizar la seguridad de su hija antes de que el cáncer se cobrara su vida. Con miedo al tráfico humano de niñas, tuvo que encontrar un nuevo hogar y una nueva familia para su hija en medio de una guerra brutal. Cómo se podría lograr esto, no tenía idea, pero tenía que intentarlo.
Juntas, ella y su hija hicieron ese largo viaje en tren hasta la frontera polaca y luego en autobús hasta el centro de refugiados en Przemyśl. Allí encontraron a Hadassah.
Cuando el Dr. Gileles-Hillel escuchó la historia de Elena, supo que simplemente recetarle un analgésico no era suficiente. Tenía que hacer algo para ayudar a esta mujer increíblemente valiente a encontrar un hogar para su hija.
AYUDA AL EQUIPO MÉDICO DE HADASSAH A CONTINUAR SU OBRA SAGRADA EN POLONIA
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refugiados de Ucrania. Decidió que personalmente se ocuparía del caso de Elena y Ksenya. La Sra. Kwasniewska encontró una pareja en Polonia que estaba dispuesta a recibir a Elena y Ksenya en su hogar. Los cuidarán a ambos, con la esperanza de que Elena aún tenga la oportunidad de sanar, pero también estarán listos para darle a Ksenya una nueva familia, un nuevo hogar y una nueva vida. Con el dolor de Elena bajo control, el equipo de Hadassah hizo arreglos para que madre e hija viajaran 600 millas hasta su nuevo hogar, lejos de la guerra de Ucrania. Los miembros del equipo de Hadassah, el Dr. Meir Cherniak, la enfermera Dana Ben-Bassat y la enfermera de NATAN Worldwide Disaster Relie, Liana Sholomovitch, estuvieron a su lado cuando partieron hacia un futuro más brillante. Mientras se despedían, Elena, con lágrimas en los ojos, dijo que en los últimos dos días había conocido a más personas de buen corazón que en toda su vida. “Hadassah es mucho más que un hospital en Israel”, señaló Diener. “Son personas con un corazón en todo el mundo, que están dispuestas a ir más allá del llamado del deber para ayudar a las personas necesitadas”.
AYUDE A LOS REFUGIADOS UCRANIANOS – DONE AHORA
Leyendas de las 2 imágenes de abajo:
Director Ejecutivo de HI – Jorge Diener llevando la maleta de Elena al auto
Elena y Ksenya en su nuevo hogar
