Con solo 48 horas en el lugar, los tres médicos, el Dr. Shaul Beyth, el Dr. Asaf Kedar y la Dra. Yaarit Ribak, que integran la misión humanitaria inicial de la Organización Médica Hadassah (HMO) en Polonia, ya han tenido un gran impacto. “Ves la desesperación en los rostros de los refugiados”, señala la Dra. Beyth, “pero cuando escuchan el nombre de Hadassah y que hemos llegado para ayudar, la gente respira más tranquila porque hay alguien en quien confiar”.
En un seminario web colaborativo del 9 de marzo organizado por HMO, Hadassah, la Organización de Mujeres Sionistas de América (HWZOA) y Hadassah International (HI), el Dr. Beyth explicó que hay tres objetivos para su «viaje a esta zona cercana a la guerra»: establecer conexiones con sus pares en la Universidad Médica de Lublin, el hospital más grande de la ciudad, a solo 70 millas de la frontera de Polonia con Ucrania; evaluar las necesidades de sus colegas polacos en la prestación de servicios de trauma a los refugiados; y apoyar a los refugiados con atención humanitaria básica. “No tienen dinero, ni comida, ni ropa de abrigo, ni medicamentos”, relató la Dra. Beyth. Y esta pequeña delegación ya ha comenzado a cumplir estos objetivos.
El Dr. Kedar explicó que sus colegas médicos polacos les han dicho que hay una gran brecha en su capacidad para hacer frente a un evento con víctimas masivas, ya que millones de refugiados ucranianos cruzan la frontera hacia Polonia. Han expresado la necesidad de capacitación en preparación para desastres, una necesidad que Hadassah está preparado para satisfacer.
“Evaluamos día a día lo que hay que hacer”, explicó el Dr. Ribak. “Llegarán más médicos de Hadassah la próxima semana”.
Jorge Diener, director ejecutivo de HI y parte de la delegación, comentó: “Nosotros en Hadassah fuimos creados para momentos como estos, para traer sanación a un mundo en apuros”. Añadió: “Si hacemos una diferencia en la vida de estos refugiados que están sufriendo tanto, estamos haciendo lo que debemos hacer”.
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