Cuando su familia huyó de los terroristas del Estado Islámico, en el noroeste de Iraq, las posibilidades de reparar el agujero que tenía Maryam en el corazón eran nulas. Sin embargo, hoy la bebé de 18 meses se está recuperando de una cirugía cardíaca que le salvó la vida en el Centro Médico Hadassah.
“Su situación fue muy complicada”, explicó el Dr. Eldad Erez, Presidente de la Unidad Cardiotorácica Pediátrica de Hadassah. Su corazón estaba orientado al lado erróneo de su pecho y sus arterias conectadas a las cavidades incorrectas. Adicionalmente, como la cirugía no se llevó a cabo cuando recién nació, sus pulmones estaban en peligro. “Normalmente esta cirugía se hace a los ocho meses, pero esta historia no es normal; no veo más de uno de estos casos al año”.
Después de ocho horas de cirugía, Maryam se encontraba estable en la Unidad Pediátrica de Cuidados Intensivos con un excelente pronóstico, reportó el Dr. Erez.
La madre de Maryam, Lena, quien trajo a la niña desde su campo de refugiados a los profesionales en salud de Hadassah, comentó: “Nunca terminaré de agradecerles”.
Lena y Maryam lograron llegar a Israel gracias a la organización cristiana, Shevet Achim, quienes representantes sugirieron que fuera a Hadassah y le ayudaron con los arreglos. “Tanta gente habla árabe aquí y todos son muy cálidos y atentos. Ustedes le dieron un futuro a mi hija, que Dios los bendiga”, dijo Lena.
Lee el artículo completo en Hayom Israel http://www.israelhayom.com/site/newsletter_article.php?id=24479
