Según un estudio dirigido por el profesor Hagai Levine, de la Universidad Hebrea de Jerusalén de la Facultad de Salud Pública y Medicina Comunitaria Hadassah Braun, las personas que fuman tienden a tener dos o tres veces más probabilidades de experimentar depresión que las que no fuman. Los investigadores aún no saben qué causa cuál, pero suponen que fumar causa depresión en lugar de lo contrario.
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