
Investigadores israelíes de la Universidad Hebrea y el Instituto de Medicina Militar, en colaboración con la facultad de medicina de la universidad, la Organización Médica Hadassah (HMO) y el Cuerpo Médico de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), han descubierto un nuevo y prometedor tratamiento para el shock hemorrágico, una afección potencialmente mortal causada por una pérdida de sangre grave, según The Jerusalem Post.
El estudio, publicado en la revista Scientific Reports, demuestra que la activación de la proteína quinasa C-épsilon (PKC-ε) mejora significativamente las tasas de supervivencia inicial y la estabilidad hemodinámica tras una hemorragia grave. La Dra. Liza Douiev, del Departamento de Genética de la HMO, y la Dra. Hanna Rosenman, del Departamento de Neurología de Hadassah, participaron en el estudio.
Artículo extraído de https://www.hadassah.org/